En general, los tricomas tienen una amplia variedad de estructuras y funciones, pero en la planta de cannabis son pelos glandulares compuestos por un tallo y una cabeza.

Los tricomas capitados con pedúnculo son los tipos más prevalentes y deseables en la planta de cannabis. Se ven como tubos largos y delgados con un globo redondo en la parte superior. Dentro de estos pequeños tricomas, y específicamente en la cabeza glandular, la planta de cannabis produce compuestos únicos que le dan a nuestra planta favorita su magia.

Los tricomas crecen por toda la planta de cannabis, pero son de la más alta calidad y cantidad en las flores y en las hojas pequeñas que las rodean. Al principio del ciclo de floración de la planta, los tricomas son claros, pero hacia el final del ciclo de vida, las cabezas de los tricomas se vuelven turbias y, eventualmente, ámbar. Esto es una indicación de la madurez de la planta y la señal de que los cannabinoides y terpenos están en un nivel máximo de expresión y madurez.

Aprende cómo cosechar tricomas en su punto óptimo de madurez en nuestro artículo Cómo Cosechar Cannabis para su Madurez Óptima.

Producción de Tricomas

El estrés leve a la planta durante el final de su ciclo de floración puede estimular un aumento en la producción de tricomas. Este es un equilibrio delicado, ya que demasiado estrés puede ser perjudicial, pero la cantidad adecuada obliga a la planta a invertir más energía en la producción de tricomas como mecanismo de defensa. Introducir luz UV-B y disminuir la humedad son dos ejemplos de factores de estrés que pueden ser efectivos.

Mantener temperaturas frescas es otro componente clave para proteger y preservar los tricomas. Las temperaturas superiores a 80 grados Fahrenheit pueden degradar los tricomas y causar que los terpenos se evaporen, deshaciendo todo tu trabajo para ayudar a la planta a alcanzar su máximo potencial.

Preservación y Protección

Manejar el material de partida de cannabis con cuidado también es esencial para preservar los tricomas. Los tricomas son muy delicados, lo que significa que pueden dañarse fácilmente. Evita el trato brusco, el mal manejo y la agitación excesiva, ya que las cabezas de los tricomas pueden romperse y causar que los compuestos en su interior se oxiden. Esta oxidación tiene un efecto negativo en la calidad del rosin, así que ten mucho cuidado al manipular el material de cannabis.

Recolección de Tricomas

El calor y la presión aplicados al material de cannabis durante el proceso de extracción de rosin transforman los tricomas que contiene, liberando los compuestos en su interior y forzándolos a fluir lejos de la presión.

El material resultante es el rosin que buscamos, y es la parada final en el largo viaje de los tricomas desde el cultivo hasta la cosecha y la extracción.

Los tricomas pueden ser prensados directamente de flores de cannabis secas y curadas (conocido como rosin de flor) o primero aislados y recolectados antes de ser prensados (conocido como rosin de hash).

Los tricomas recolectados para rosin de hash pueden extraerse primero de la planta utilizando varios métodos. Posiblemente el más popular es el método de extracción con agua helada, en el que el material de cannabis se agita en agua helada y luego se filtra del agua utilizando un conjunto de pantallas. Las pantallas capturan los tallos y cabezas de los tricomas, los cuales se recolectan de las pantallas, se secan y luego se prensan. El hash bubble produce algunos de los mejores rendimientos y de la más alta calidad de rosin disponibles.

Aprende a hacer hash bubble en nuestro artículo Cómo Lavar Hash Bubble.

Conclusión

Los tricomas son el premio definitivo, y estos modestos pequeños apéndices merecen todo el cuidado y atención que se les brinda durante el cultivo, la cosecha, el manejo y, finalmente, el prensado. Cuando cultives cannabis con el propósito de extraer rosin, piensa en ti mismo como un agricultor de tricomas. Cada acción que realices debe estar orientada a facilitar la expresión más completa de los tricomas de las plantas.

Los tricomas son la fuente última de verdad para la planta de cannabis. Capturan la genética de la cepa específica y el entorno en el que se cultivó la planta. Los tricomas son como una huella digital de la planta de cannabis y no mienten. ¿Qué historia están contando tus tricomas?

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